NUTRICIÓN, GUÍA DE ALIMENTACIÓN SALUDABLE, POR LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE NUTRICIÓN COMUNITARIA

¿QUÉ FUTURO NOS CONSTRUIMOS CON NUESTRO CONSUMO? Somos lo que consumimos. Lo que comemos e ingerimos construye o destruye nuestro cuerpo, nuestra salud, nuestra vida.

Muchos creen que el gobierno, las autoridades públicas, los medios de comunicación o cualquier entidad ajena a ellos mismos, tienen que cuidarlos y protegerlos, y eso los libera y excusa de no aprender sobre cómo alcanzar y mantener una salud óptima. No es así. La sociedad está diseñada para promover la enfermedad: vicios, químicos deletéreos, malos hábitos. Sólo actúan cuando el escándalo es mayor y el daño extendido. Sino, es más cómodo ignorar, denegar, mentir. El cinismo es la norma, no nos hagamos ilusiones. Pero uno es responsable de uno mismo, y de su familia. Podemos cambiar. Podemos dar un giro y renunciar a que nos manipulen y condicionen. Podemos aprender a mejorar nuestra salud, nuestra vida. Y eso comienza por cuidar lo que consumimos y usamos. ¿Estamos empleando productos biodegradables, que no agreden y dañan el medio ambiente? ¿Estamos renunciando a los seudoalimentos sin nutrientes y repletos de químicos, grasas trans y calorías vacías? ¿Escogemos ajustarnos a un estilo de vida más positivo, proactivo y saludable? Es nuestra decisión qué vía elegir. Y serán nuestras las consecuencias de una y de otra. ¿Qué calidad de vida construimos? ¿Qué futuro seleccionamos para nosotros mismos y para los nuestros? Nunca como hoy la información es tan rica y específica. Nunca como hoy tanta responsabilidad recayó en nuestras manos:

http://www.scribd.com/doc/8033147/Nutricion-Guia-de-alimentacion-saludable

USTED PUEDE SANAR SU VIDA, POR LOUISE L. HAY

LA ELECCIÓN DE VIVIR MEJOR Y SANAR ES NUESTRA, Y DE NADIE MÁS. Asumir la responsabilidad de nuestra salud, nuestro bienestar, nuestro nivel de energía y nuestra vida es el primer paso para vivir de manera responsable. El estruendo publicitario, con sus engañosos reclamos, incentivan los peores hábitos. Pero es nuestra responsabilidad discernir, escoger, seleccionar. La industria de la enfermedad predomina: seudoalimentos sin nutrientes, bombas químicas, cancerígenas, productos que enferman, dañan el corazón, el cerebro, las arterias, los órganos; fármacos con efectos secundarios deletéreos… Todo eso abunda y sobreabunda. Miles de millones se gastan en engatusarnos, en desinformarnos, en desorientarnos, en malcriarnos. Muchos se lucran de nuestra ignorancia y nuestra irresponsabilidad. Y trabajan para mantenernos en esa situación. Pero podemos elegir. Tenemos la opción de escoger una conducta más sensata, coherente y positiva. No podemos esperar que el Estado, donde los intereses corrompen y predominan, ni nadie nos proteja. Tenemos el deber de aprender, de romper la programación malsana de hábitos que nos enferman y nos matan. Es nuestra elección. Las enfermedades degenerativas y carenciales pueden ser desterradas de nuestras vidas. Es una elección individual. Es lo que Louise L. Hay, la reputada autora norteamericana, nos comparte:

http://www.scribd.com/doc/6390245/Louise-L-Hay-Usted-Puede-Sanar-Su-Vida

CONSUMIR MENOS, VIVIR MEJOR, POR TONI LODEIRO

PODEMOS ELEGIR CAMBIAR Y MEJORAR NUESTRA VIDA. ¿Qué consumimos? ¿Permitimos que la publicidad nos atiborre de productos sin nutrientes, recargados de químicos, grasas saturadas y calorías vacías, que agreden y destruyen nuestra salud? La información sobre lo que consumimos y sobre cómo mejorar nuestra dieta para tener mayor salud, energía y bienestar, abunda en este tiempo. Y la peor opción es ignorarla y actuar de manera automática, siguiendo rutinas dañinas, siendo víctima de conductas preprogramadas por la industria de la enfermedad. Nuestra salud y bienestar son nuestra responsabilidad. No de otro. La consecuencia del descuido en aprender a mejorar nuestra conducta de consumo no se limitan al despilfarro económico, se expanden a la contaminación del medio ambiente, a la desnutrición y a las enfermedades carenciales y degenerativas, a comprometer la salud y la vida. Podemos elegir, y eso significa escapar a la trampa de gustos que se nos impusieron, de hábitos que nos programaron, de preferencias que no hicimos de forma consciente y voluntaria. Podemos cambiar. Podemos decidir. Una forma más sana de vivir impactará nuestra vida y a la de los nuestros. ¿Te animas a ensayarla?

http://www.scribd.com/doc/7787738/Lodeiro-Toni-Consumir-Menos-Vivir-Mejor